top of page

¿Qué es y qué no es la educación emocional?

¿QUÉ ES Y QUÉ NO ES LA EDUCACIÓN EMOCIONAL?

La educación emocional, aborda abundantes aspectos relacionados con nuestras capacidades.

  1. En primer lugar, la pedagogía emocional trata de educar la percepción de las emociones, ayudando así a la identificación y reconocimiento de los propios sentimientos y los de los demás.

  2. Por otro lado, recibir una correcta educación emocional nos ayuda a desarrollar habilidades para sopesar de manera eficiente los sentimientos y la razón a la hora de solucionar problemas. Las emociones afectan a nuestro sistema cognitivo y proporcionando la clave a la hora de tomar decisiones. Sopesando y analizando racionalmente nuestras emociones, somos capaces de focalizar nuestra atención, en lo realmente importante en cada situación.

  3. Además, ser consciente de nuestros estados emocionales desata también la chispa en nuestro pensamiento creativo, realizando una influencia de lo más positiva en nuestro razonamiento.

  4. La educación emocional nos ayuda también a regular nuestras emociones y sentimientos de cara a la relación con nosotros mismos y los vínculos con los demás, controlando conscientemente nuestras emociones para crecer emocional e intelectualmente, sabiendo por ejemplo, hacer frente a nuestro retos, practicando la resiliencia y modificando y regulando nuestra conducta según el desarrollo de las diferentes situaciones.


Comprender la profundidad y el funcionamiento de las emociones, significar tener la capacidad para analizar el amplio rango de señales que desatan nuestras emociones. Esto nos ayuda a anticiparnos a las situaciones previendo las consecuencias, como también a reflexionar de manera retrospectiva encontrando las causas que han generado la situación en la que nos encontramos.

Algunas de las evidencias científicas más claras, son:

  1. La neuroplasticidad emocional, por la cual se asocian las capacidades de aprendizaje y memoria al plano afectivo. Todo lo que conlleva emoción se recuerda siempre con más facilidad, y lo que no se olvida también más fácilmente. conocer y profundizar en las capacidades emocionales, nos ayuda también a acabar con el anticuado enfoque dual entre la razón y la emoción, colocándolas en la eterna batalla, por el predominio en la importancia y validez.

  2. El binomio indisoluble entre razón y emoción, donde poseer menos emociones es ser menos racional, pues ser inteligente emocionalmente significa racionalizar eficazmente las situaciones, obteniendo más éxito personal, académico y profesional.

  3. La educación emocional es clave en la prevención de problemas vinculados a las emociones, como; adicciones, trastornos alimenticios, accidentes, depresión y ansiedad, violencia, fracaso escolar, relaciones superficiales y desmotivación.


Sin embargo, actualmente, las nuevas corrientes que abordan la realidad de manera parcial, producen ideas distorsionadas. Algunas de ellas son:

  1. La obsesión por el desarrollo de competencias específicas, en vez del desarrollo integral del individuo.

  2. La hegemonía del psicologismo, convirtiendo lo más trivial en algo médico o patológico.

  3. El mecanicismo tecnológico, como eje central del desarrollo, con un saber prefabricado y encajonado, dejando al margen el carácter activo, único y elaborado tanto del docente como del alumno.

  4. El positivismo exacerbado, donde se vive del continuo mensaje publicitario positivo y del kit rápido de supervivencia para ser feliz, buscando el propio interés y la gratificación inmediata.

En definitiva, los modelos que NO son educación emocional:

  1. Educar de manera más cariñosa de lo normal o practicando la sensiblería.

  2. Esclavizar las emociones y hacerlas emerger forzosamente tanto como suprimirlas y censurarlas.

  3. Educar catalogando situaciones como las óptimas emocionalmente. Esto no debe ser así. El alumno debe ser consciente y acceder al conocimiento emocional para establecer su propia percepción, comprensión, valoración y manejo de sus emociones.

  4. Educar reprimiendo las emociones negativas buscando extirpar emociones como el miedo, la vergüenza o la tristeza. Tenemos que poder emocionarnos de manera natural y desde la libertad.

WHAT IS AND WHAT IS NOT EMOTIONAL EDUCATION?

Emotional education addresses many aspects related to our abilities.

– In the first place, emotional pedagogy tries to educate the perception of emotions, thus helping to identify and recognize one’s own feelings and those of others.

– On the other hand, receiving a correct emotional education helps us to develop skills to efficiently weigh feelings and reason when solving problems. Emotions affect our cognitive system and provide the key when making certain decisions. By rationally weighing and analyzing our emotions, we are able to focus our attention on what is really important in each situation.

– In addition, being aware of our emotional states also unleashes the spark in our creative thinking, making a most positive influence on our reasoning.

– Emotional education also helps us to regulate our emotions and feelings in the face of our relationship with ourselves and our ties with others, consciously controlling our emotions to grow emotionally and intellectually, knowing, for example, to face our challenges, practicing resilience and modifying and regulating our behavior according to the development of different situations.

Understanding the depth and functioning of emotions means having the ability to analyze the wide range of signals that our emotions unleash. This helps us to anticipate situations by anticipating the consequences, as well as to reflect retrospectively finding the causes that have generated the situation in which we find ourselves. Some of the clearest scientific evidence are:

Emotional neuroplasticity, by which learning and memory capacities are associated with the affective plane. Everything that carries emotion is always more easily remembered, and what does not is also more easily forgotten. Knowing and deepening emotional capacities also helps us to end the antiquated dual focus between reason and emotion, placing them in the eternal battle, for the predominance of importance and validity.

– The indissoluble binomial between reason and emotion, where having fewer emotions is being less rational, since being emotionally intelligent means effectively rationalizing situations, obtaining more personal, academic and professional success.

– Emotional education is key in preventing problems related to emotions, such as; addictions, eating disorders, accidents, depression and anxiety, violence, school failure, superficial relationships and demotivation. However, currently, the new currents that address reality in a partial way, produce distorted ideas. Some of them are:

– The obsession with the development of specific competences, instead of the integral development of the individual.

– The hegemony of psychologism, turning the most trivial into something medical or pathological.

Technological mechanicism, as the central axis of development, with a prefabricated and boxed knowledge, leaving aside the active, unique and elaborate character of both the teacher and the student.

– The exacerbated positivism, where one lives from the continuous positive advertising message and the quick survival kit to be happy, seeking self-interest and immediate gratification. In short, the models that are NOT emotional education,

Educate in a more affectionate way than normal or by practicing sentimentality. – Enslaving emotions and making them emerge forcibly as well as suppressing and censoring them.

Educate by cataloging situations as emotionally optimal. This should not be so. The student must be aware and access emotional knowledge to establish their own perception, understanding, assessment and management of her emotions.

Educate by repressing negative emotions seeking to eradicate emotions such as fear, shame or sadness. We have to be able to get emotional in a natural way and from freedom.

2 views

Commentaires


bottom of page